El verano es momento para reuniones con amigos y familiares, y no puede faltar en la mesa la tabla de quesos. Os proponemos cuatro sencillos consejos para preparar la tabla perfecta.
Consejos para realizar una deliciosa tabla de quesos
Hay puntos esenciales para hacer la tabla de quesos perfecta: elegir los tipos de quesos, tener en cuenta la cantidad por cada comensal, los acompañamientos de estos quesos y, por supuesto, la presentación.
- Quesos. Cuatro o cinco quesos variados en tipo de leche (cabra, oveja y/o vaca), textura (dura, semidura o blanda) y maduración (tierno, semicurado, curado o viejo/añejo).
- Cantidad. Si se va a servir junto a otras opciones, lo ideal son 80 gramos por comensal. Si el queso va a tener mayor protagonismo, son 150- 200 gramos por comensal.
- Acompañamientos. los panes y las galletas maridan con quesos suaves; panes de semillas con quesos de cabra; avellanas, almendras o nueces, con quesos de pasta cocida y almendras y anacardos, con quesos viejos y curados. Las pasas, ciruelas, arándanos y orejones con todo tipo de quesos. Los trozos de manzana son clave para limpiar el sabor entre queso y queso.
- Presentación. Para habituar el paladar de nuestros invitados, es recomendable desde más suave (quesos tiernos) hasta el fuerte. Si el plato es redondo, hay que seguir el sentido de las agujas del reloj. Si el plato es rectangular, lo mejor es hacerlo de izquierda a derecha.
Voilà, con cuatro sencillas pautas ya se puede hacer una estupenda tabla de quesos. Ahora sólo falta tu box de quesos.